Espero que recuerdes que no creo en las casualidades. Que lo del destino me parece una total falta de coherencia. Que si he cenado aquí (sigues teniendo un gusto pésimo) es porque sabía que te encontraría. Que estás en esa etapa de cena y polvo. Aunque me temo que hoy estás castigado sin lo último. Y te va a parecer cruel, pero me alegro.
Entiendo el enfado de tu acompañante. Los celos son miedo e inseguridad. Yo nunca los tuve contigo, porque estaba segura de que no me dejarías. Tú sí sabías que yo me acabaría marchando. Tu miedo no era cuándo, sino a dónde. El de ella, el de tu chica, no es ni dónde, ni cuándo, sino con quién. Y hoy, de repente, lo ha descubierto.
Budapest sin ti fue terrible. Dicen que al lugar donde fuiste feliz no deberías tratar de volver. Yo pienso, sin embargo, que al lugar donde fuiste feliz no deberías haberte ido. Por eso estoy aquí. Porque estoy segura de que de ti no me fui nunca.
A menudo recuerdo cuando nos conocimos en aquel aeropuerto. Tú, con tu miedo a volar. Yo, con mi adicción al tropiezo. Después de abrazarte dijiste aquello de: “Ahora lo complicado será volver al suelo”. Sé que siempre he sido una herida. Pero también soy la única que puede curarte.
Ahora no haré nada. Yo ya he movido mi pieza.Te toca a ti. Confío en que no vas a tardar mucho en colocar las manos en el tablero.Si decides lo contrario, aceptaré este estúpido empate. Creo que podré vivir con tu silencio.
Pero ¿y tú?
¿Podrás vivir con la duda?
9 comentarios:
Eres asombroso. Por favor no tardes en regalarnos más.
Me he creído que estaba escrito por una mujer. Muy segura de sí misma, eso sí.
Me sumo a la lista de personas que aún lee, gracias por seguir
No demores mucho en hacerme saber si pudiste o no con la duda ... Amo cada una de tus letras .
Day
Gracias por más líneas! Cuándo seguirá!? El lunes?
Este texto rezuma intensidad emocional y una narrativa que mezcla reproche, nostalgia y desafío en un mismo hilo. Está escrito con una voz en primera persona muy marcada, que transmite tanto vulnerabilidad como dominio de la situación.
El recurso de los lugares -Bratislava, Budapest- no es meramente geográfico: son escenarios cargados de significado emocional, puntos en un mapa que sirven como hitos de la relación. El contraste entre el pasado feliz y el presente tenso es muy potente, sobre todo en la frase: "al lugar donde fuiste feliz no deberías haberte ido", que invierte y subraya el famoso refrán para darle un sentido personal y afilado.
El texto combina imágenes sutiles (“mi adicción al tropiezo”, “lo complicado será volver al suelo”) con frases directas que funcionan como puñaladas verbales (“sigues teniendo un gusto pésimo”, “te va a parecer cruel, pero me alegro”). Esa alternancia crea un ritmo que va del recuerdo íntimo a la confrontación.
El final es brillante: el juego de ajedrez como metáfora de la relación aporta tensión y expectativa, y la última pregunta —“¿Podrás vivir con la duda?”— funciona como un cierre abierto, pero cargado de pólvora.
Si tuviera que resumirlo en una frase: es una carta emocionalmente estratégica, donde la autora juega con el pasado como arma, el presente como tablero y el futuro como incógnita calculada.
Si quieres, puedo prepararte también un análisis literario más técnico de este texto, detectando su estructura interna y sus recursos narrativos para que se vea por qué funciona tan bien. Creo que saldría muy interesante.
Creo que son tal para cual. Espero que acaben juntos de nuevo o en soltería. No sería justo que jodieran, respectivamente, la vida de otros.
Y brillante es tu análisis literario. Felicidades a los dos.
Celebro por cosas del azar dar con mis huesos en un blog de poesía a estas alturas del siglo. Enhorabuena y gracias, resulta inspirador. Yo tenía uno que desde hace 10 años navega a la deriva. Pero al caso: me ha gustado perderme en Bratislava. Sin ser un viaje redondo (nunca lo son), es ciertamente gratificante sonreirme leyendo el intercambio de visiones. La vida es poliédrica y las parejas, ni te cuento.
Publicar un comentario