lunes, 1 de julio de 2024

El CAIRO

 

A veces nos miramos todavía, estrangulamos el presente y nos quedamos sostenidos en aquella tarde en la que nos faltó un beso y nos sobró el miedo. Luego la vida siguió y no contó con nosotros. Pero a menudo, en la calle nos cruzamos y en el hola educado hago planes de lo que pudo haber sido, como si el pasado se pudiera moldear a través de la memoria. " No guardes un deseo para cuando sea posible, porque lo posible solo sucede cuando lo deseas" Pienso mientras nuestros pasos se alejan en direcciones opuestas. Y aún tengo el beso tatuado a tu nombre entre los labios. Pero también tengo aún el miedo de aquella tarde calándome los huesos. Como una gota de lluvia cayendo siempre en el mismo sitio. Todo el tiempo, desde entonces hasta ahora. Desde ahora hasta lo eterno. Es en un beso donde empieza todo. Un beso lleva a la caricia. La caricia lleva al amor y el amor al deseo.El deseo al desnudo. El desnudo al sexo. El sexo lleva al sexo. Y a más sexo. Y el más sexo lleva al beso. Y el beso se convierte en rutina, en inercia, en costumbre. Y el futuro pierde todo su significado. Y el miedo ignora al miedo. Y contigo perder el miedo es perderte a ti. Por eso no te beso. Por si el beso de repente espanta a todos los monstruos del pasado. Y después los echo de menos. A los monstruos y al beso. Y al cruzarme contigo ya solo me queda la certeza de lo que fue. No de lo que pudo haber sido. Y dejamos de mirarnos. Y de besarnos. Sin besarnos siquiera.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

También se besa con los ojos, igual que se acaricia con las palabras.

Gracias por otro lunes

Maria ♥️

Anónimo dijo...

Simplemente bello, una vez más me dejas sin palabras ❤️
Day

Anónimo dijo...

Increíble ♥️